Una sonrisa sana y bonita aumenta su confianza y favorece su bienestar general. Practicando una higiene bucal adecuada y asistiendo a revisiones periódicas, puede mantener su sonrisa sana al igual que el resto de su cuerpo. Cuando se tiene una infección dental, las bacterias pueden extenderse al resto del cuerpo, lo que conlleva un mayor riesgo de complicaciones con enfermedades sistémicas. Algunas enfermedades comunes relacionadas con una mala salud bucodental son la neumonía, los accidentes cerebrovasculares y las enfermedades cardiovasculares.
Si quiere lo mejor para su salud en general, invertir en atención dental preventiva es crucial. Afortunadamente, puede acceder a esta atención sin menoscabar sus finanzas, ya que la mayoría de los planes de seguro cubren los procedimientos. Muchos dentistas cuentan con programas de afiliación que le ayudarán a mantener su rutina de cuidado dental para mejorar su bienestar general. Siga leyendo estos consejos de la clínica dental Salvador García para obtener más información sobre el cuidado dental preventivo que puede ayudarle a conseguir una salud oral óptima.
¿Qué es la odontología preventiva?
La odontología preventiva incluye el diagnóstico y el tratamiento de los problemas de los dientes y las encías para mantener una buena salud dental y general. Algunas de las formas más comunes de cuidar la salud bucal son la práctica de una higiene bucal adecuada y las revisiones dentales periódicas. La odontología preventiva es una colaboración entre usted y su dentista para garantizar que su salud bucal se mantenga en plena forma.
Aunque todo el mundo puede beneficiarse de la odontología preventiva, los niños son los que más beneficios obtienen, ya que sus dientes aún están en desarrollo. La odontología preventiva le ayuda a evitar problemas futuros, como caries, desgaste del esmalte y enfermedades de las encías. Fomenta los buenos hábitos de salud bucal, como el cepillado y el uso del hilo dental a diario. Con la odontología preventiva, se pueden detectar los problemas de salud bucodental a tiempo, antes de que se agraven y se vuelvan más complejos.
Tratamientos preventivos comunes
El cuidado dental preventivo incluye visitas constantes y frecuentes a un profesional dental. Trabaja con tu dentista y diseña la estrategia que mejor se adapte a tu situación de salud bucodental. Acudir a un profesional al menos dos veces al año no sólo le ofrece limpiezas y revisiones especializadas, sino que también le ayuda a ahorrar dinero a largo plazo al tratar los problemas dentales a tiempo.
Estos son algunos de los tratamientos preventivos más comunes
Exámenes: Los exámenes dentales constituyen una parte crucial de la odontología preventiva. El dentista examina a fondo las encías y los dientes para detectar enfermedades y caries, así como cualquier signo de cáncer oral. Además de reducir el riesgo de padecer enfermedades orales y sistémicas, también recibirá consejos de expertos sobre el cuidado eficaz de sus dientes.
Radiografías: Su dentista utiliza una cámara digital para capturar una imagen precisa de su estado. Las radiografías ayudan a identificar problemas dentales invisibles durante un examen visual. Estos incluyen abscesos dentales, tumores, pérdida de hueso, mala posición de los dientes y otros problemas debajo de la línea de las encías.
Limpiezas: Las limpiezas dentales profesionales eliminan la placa y el sarro de los dientes y un poco por debajo de la línea de las encías. También eliminan las manchas dentales extrínsecas que pueden causar decoloración.
Flúor y sellantes: El flúor y los sellantes son recubrimientos que tu dentista aplica en tus dientes para fortalecer el esmalte y prevenir la caries. El flúor actúa como barrera para evitar que las bacterias dañen el esmalte. El tratamiento es ideal para niños, personas con altos niveles de bacterias y personas con problemas de sequedad bucal o sensibilidad. Los sellantes de resina biocompatible se aplican en capas para rellenar las fosas y ranuras que atrapan las bacterias. Evitan que los alimentos se adhieran a los dientes y aumenten el riesgo de caries.
Protectores bucales: Si practicas deportes o actividades muy físicas, debes utilizar siempre un protector bucal. Los protectores bucales protegen tus dientes y encías de los daños causados por traumatismos o accidentes.
Educación: Tu dentista te pone al día sobre tu salud bucodental y te ofrece consejos profesionales sobre la mejor manera de cuidar tus dientes y los de tus hijos. También te aconseja sobre los mejores productos y herramientas innovadoras que hacen que el cuidado de tus dientes y encías sea más fácil y eficaz.
Recuerda lo básico
Los tratamientos preventivos sólo pueden tener éxito si tú pones de tu parte. Practica lo siguiente para mantener tu salud bucal en buen estado.
Cepillado: Es fundamental cepillarse los dientes dos veces al día, por la mañana y por la noche. Utiliza un cepillo de dientes con cerdas suaves y pasta dentífrica con flúor.
Uso del hilo dental: El uso correcto del hilo dental elimina las partículas de comida que se encuentran entre los dientes, donde el cepillo no llega. Utilice el hilo dental a diario para evitar que la acumulación de bacterias se convierta en sarro y placa.
Dieta: Lleva una dieta equilibrada para tener una sonrisa sana. Incluya alimentos ricos en vitaminas, beba mucha agua y limite su consumo de azúcar para mantener sus dientes y encías libres de enfermedades.
Revisiones periódicas: Recuerda acudir a tus revisiones dentales semestralmente y con más frecuencia si eres propenso a los problemas dentales. Intenta fijar un recordatorio en tu calendario y presupuestar los tratamientos para asegurar tu compromiso.
El cuidado dental preventivo es fundamental en todas las etapas de la vida. Cuanto más se dedique a participar en buenos hábitos de higiene bucal, menor será el riesgo de caries y enfermedades, y menos tendrá que ir al dentista. Con la ayuda de un profesional, puedes aprender la mejor manera de cuidar tu salud bucal y disfrutar de una sonrisa brillante y hermosa para toda la vida.