Prueba a largo plazo del Volvo XC90 B5 MHEV Diesel

Se dice que ahorra hasta un 15% de combustible y emisiones de CO2 en condiciones reales. Hablamos del Volvo XC90 B5 AWD MHEV diésel, que supuestamente alivia y refuerza el motor a partes iguales mediante un sistema eléctrico de 48 voltios y RSG. El informe de conducción muestra cómo es en la realidad. En el concesionario Crestanevada de coches ocasión Madrid, encontrarás el coche de tus sueños al mejor precio.

Modelo del año 2020 con pequeños cambios en el XC90

El modelo 2020 del Volvo XC90 solo presenta cambios menores para el que ya es prácticamente el modelo más antiguo de la gama. Estos incluyen una parrilla sutilmente revisada, nuevas llantas, nuevos colores y un programa de asistencia en toda regla. Todo lo demás es como siempre, el Volvo XC90 es uno de los coches más seguros del mundo con uno de los mejores sistemas de sonido del mundo. Hay que quitarse el sombrero ante el marketing de los suecos. Con la nueva denominación para los híbridos suaves, el diésel desaparece visualmente de la carretera. Tanto los híbridos suaves de gasolina como los diésel llevan la denominación B, así como el número correspondiente al nivel de prestaciones. Incluso para los profesionales, el coche ya no se distingue claramente del tipo de motor cuando está parado.

El Volvo XC90 B5 MHEV diésel está propulsado por el motor diésel biturbo de 2,0 litros y tiene una potencia de 235 CV (173 kW) y un par máximo de 480 Nm. El generador de arranque accionado por correa produce un máximo de 10 kW (14 CV) y un modesto par de 40 Nm. Una función que realiza impecablemente y bien es, por ejemplo, el delicado arranque del motor. El conductor no puede utilizar ninguna otra función. Gracias a la recuperación de energía de frenado, el sistema start-stop puede desactivar el motor durante más tiempo en los semáforos, pero eso es todo. Actualmente, otros sistemas pueden hacer mucho más.

Este es también el punto criticable del XC90 Mild Hybrid, porque el modo de navegación a vela, por ejemplo, que se utiliza en otros vehículos de esta clase (de precio), aún no está disponible. Esto probablemente tendrá que esperar hasta la próxima revisión. El consumo de combustible de 8,5 l/100km en autopista está bien, pero podría ser aún menor si se aprovechara al máximo la tecnología. Lo mismo se aplica especialmente al tráfico urbano (9,3 l/100km), donde no se puede acumular suficiente energía de frenado para que el RSG funcione del todo. Además, el sistema Start-Stop podría activarse mucho antes y no sólo desde una cuasi parada. Para más información, consulte nuestro reportaje de conducción en vídeo.

Informe de conducción en vídeo Volvo XC90 B5 AWD MHEV Diesel

Básicamente, tendremos que esperar a ver cómo Volvo sigue desarrollando la tecnología. De momento, están trabajando por debajo de las posibilidades que conlleva semejante inversión y, por tanto, complejidad. Entre las posibles mejoras ya se podría incluir la desactivación del motor al navegar o la activación antes del sistema start-stop. Dos temas que otros fabricantes ya han implementado a estas alturas.